Kímolos: Tu refugio secreto en el Egeo
Escondida en las Cícladas, Kímolos es una joya oculta esperando ser descubierta. Sus vecinos, como la popular Milos, ofrecen aventuras adicionales de un día, pero la belleza intacta de Kimolos atrae a quienes buscan un retiro tranquilo. Con un área de 40 kilómetros cuadrados y una población de alrededor de 1.700 personas, esta isla es perfecta para aquellos que prefieren una experiencia más íntima de la vida isleña griega.
Principales atracciones de Kímolos
Kímolos es un tesoro de maravillas naturales e históricas. En el corazón de la isla se encuentra el pintoresco pueblo de Chorio, un laberinto de calles estrechas y encaladas con acogedoras tabernas y plazas pintorescas. El antiguo castillo, Kastro, ofrece una visión del pasado de la isla, con su arquitectura medieval que vigila en silencio sobre el pueblo.
Para los amantes de la playa, la costa de la isla ofrece lugares idílicos como Prassa, conocida por sus aguas cristalinas y arenas finas, y la más rústica playa de Aliki, donde la naturaleza se mezcla con la tranquilidad. Si tienes ganas de explorar, Polyaigos, una isla deshabitada cercana, es una visita obligada, famosa por sus aguas turquesas y su increíble vida marina.
Experiencias imperdibles en Kímolos
Los entusiastas del senderismo disfrutarán de los pintorescos senderos que atraviesan Kímolos, ofreciendo impresionantes vistas de las islas circundantes. En el camino, encontrarás formaciones geológicas únicas como Skiadi, una roca esculpida naturalmente en forma de hongo que se erige orgullosa en la cima de una colina, un verdadero testamento de las maravillas geológicas de la isla.
Hacer esnórquel en sus aguas cristalinas es una experiencia que no te puedes perder. O tal vez prefieras hacer kayak alrededor de las calas de la isla, descubriendo playas escondidas solo accesibles por mar.